sábado, 17 de noviembre de 2012

La Casa del Pescado


Para llegar a esta bonita casa, sin pasar de largo, deben fijarse en el cartel que ven en la foto superior, situado a pie de carretera, en la general de la Victoria a La Matanza. Suban el pequeño repecho, y encontrarán la casa con su amplia zona de aparcamiento. Lo había visto en un par de ocasiones, pero con ese nombre, a mí, que soy más de carne, no me atraía demasiado. Pero el día era uno de esos en los que salimos por ahí y se nos va el tiempo sin encontrar algo que nos guste. Estábamos cerca y subimos a ver que tal pintaba.

Pues en principio pintaba bien. La apariencia no era la que esperaba (para resumir, de sitio caro), por el contrario, nos encontramos con un sencillo y acogedor salón, que podríamos definir como el clásico Bodegón. Amplio y bastante tranquilo, aún cuando se fue llenando. Fuera, la posición elevada en la que se encuentra permite disfrutar de unas buenas vistas. Eché de menos una zona con mesas fuera, pero no había sitio. Dentro, en la barra también tenían bastante actividad. Estaba llena de clientes que preferían tomar allí un vinito y unos camarones, o un plato para picar.

En su carta, como no podía ser de otra manera, predominan los productos del mar, a los que complementan con otros platitos de comida casera. Ese día tenían en la pizarra, además del pescado fresco a elegir, Cherne, Bacalao, Camarones, Pulpo guisado, Carne con papas, Croquetas, Garbanzas y Sopa de pollo. A medida que transcurría la tarde, se fue llenando de gente. Me fije en que entraban bastantes parejas y grupos de la "tercera juventud", y ya he explicado aquí mi teoría: Nuestros mayores conocen de sobra dónde pueden comer bien y barato, y ver que muchos frecuentan un sitio es casi una garantía.

En este caso, se cumplió mi teoría. Todo lo que probamos estaba muy bueno, especialmente las Garbanzas con Bacalao, muy sabrosas. Estupendas también las Croquetas (de pescado, como no). Y la Carne con papas, además de tener una buena salsa, la carne estaba muy tierna y jugosa. Como les decía, uno es más de carne, pero estando en la casa del pescado, qué menos que probar alguno. Pedimos unas Cabrillas, bien frititas, acompañadas de papas arrugadas y mojo. Nos gustaron mucho. Y se veía mucho pescado en las mesas, lo que quiere decir que estarían buenos. Para rematar, postres caseros: de Hojaldre y otro de tres chocolates. De beber, una cuarta de vino, cinco refrescos y agua. Nos atendieron muy bien, y nos fuimos muy a gusto. También se cumplió mi teoría en cuanto al precio. Nos pareció barato: poco más de 39 euros. Un sitio recomendable, aunque se sea más de carne, como yo.

Dirección: C/ Higueras de Borrallo, 13-A.
LA MATANZA DE ACENTEJO. Teléfono: 922-579 471

sábado, 10 de noviembre de 2012

El Engazo



Este Engazo es el Restaurante, que han reabierto hace poco, justo enfrente de donde antes se ubicaba el Bodegón El Engazo, del que guardan el logo y algunos de sus platos. Nunca tuve el gusto de ir a ese Bodegón, pero las referencias que tengo eran muy buenas, tanto de la comida como del ambiente, en esa casa antigua canaria. No sé si serán los mismos propietarios, ya que este Restaurante estaba atendido por gente joven, que se esforzaba porque todo quedara bien. Ahora están en los bajos de una casa grande, rodeada de jardines.

Esto no es el patio canario que vi en algunas fotos del anterior Bodegón. El amplio salón, se podría decir que está dividido en dos ambientes, sin que haya una división física. Al entrar nos encontramos con una especie de tasquita, con la barra, piso de parquet, mesas de troncos o de barriles, y con una zona de vinoteca a la vista. Avanzando por el salón, en un punto se acaba el parquet y aquí el aspecto si es más el de un Bodegón. La barra que cubre el acceso a la pequeña cocina, está decorada con maquetas de casas canarias.

La cocina se centra en la comida canaria. Carta no muy amplia, pero con bastante variedad para elegir un buen picoteo. Mantienen más o menos los platos del antiguo Bodegón: las Croquetas de plátano o de atún, la Ropa vieja, Conejo en salmorejo, y ese día ofrecían también Garbanzas, Rollitos de Berenjenas, Champiñones rellenos, Cherne guisado o encebollado, Costillas fritas o piña con costillas. Como decía antes, el servicio muy atento y preocupándose de que todo estuviera bien. No había demasiada gente y eso también facilitaba la labor, ya que ese gran salón, cuando se llene (que ojalá sea siempre), debe dar bastante trabajo.

Nosotros pedimos, y ya anticipo que todo estaba muy bueno, un platito de Queso asado con mojo y miel, las Croquetas de atún y de plátano, Ropa vieja, Carne fiesta y un estupendo y sabroso Conejo en salmorejo con papas arrugadas. De postre, caseros una Tarta de tres chocolates y el otro no soy capaz de recordarlo. No tengo la factura, y la galleta me engaña, ya que natillas nunca pedimos. Si recuerdo que estaba bueno, pero yo a los postres no les presto mucha atención. De hecho, de haberme dado cuenta antes, hubiera pedido mi postre preferido. Colgando en la entrada, tenían una manillas de plátanos con muy buena pinta, y que no estaban allí para decorar, sino como postre. De beber, una cuarta de vino y cuatro refrescos. Nos gustó mucho el sitio, y de precio no está mal, en la media, unos 45 euros. Suerte y que tengan mucho trabajo.

Dirección: Ctra. Antigua la Luz. Las Candias (LA OROTAVA)
Teléfono: 922-333 556

sábado, 3 de noviembre de 2012

Bodegón Las Cucharitas


En esta semanita que nos ha tocado de viento y agua, qué bueno recordar el espléndido día de Octubre el que nos encontramos al llegar a Garachico (ver foto de la izquierda). Sol radiante, bastante calor, y el mar, cristalino, invitaba a bañarse. Pena de no haber llevado bañador. Daba envidia ver a la gente dándose un chapuzón en el Caletón o en el Muelle. Incluso la remozada piscina municipal se encontraba llena de gente. Nos quedamos por allí a dar un paseo, y entramos en este "Bodegón", situado justo frente a los aparcamientos de la playa del Muelle (el Street View de Google no llega hasta allí), ya que anunciaba en la pizarra Potas en salsa, y además tenía un patio interior muy bonito.

Patio que estaba muy concurrido. Curioso que allí se hacía cola para entrar (nosotros cogimos una de las últimas mesas libres), y el amplio comedor interior se encontraba completamente vacío. Al final hubiera sido mejor habernos quedado en ese comedor, donde hubiéramos estado más fresquitos. Fuera, pese a estar abierto, con unas vistas estupendas, y las mesas estar a la sombra bajo tejado, lo cierto es que al calor sofocante que hacía se le añadía el que desprendía la brasa. Y brasa también las que nos dieron, para rematar, un grupito de moscas que se unieron a la sobremesa.

La carta ofrece un amplio abanico de platos para elegir (numerados hay 28). Tocan un poco de todo,  predominando la cocina canaria: cuchara, carnes, algo de pescado.. . Los fines de semana encienden la parrilla para completar la oferta con una buena carne a la brasa. Si quieren ver el detalle de lo que ofrecen y los precios, pulsen aquí. El sitio es muy bonito, la carta variada, y lo que faltaba por saber es si al final se iba a unir a los (muchos) que hay por la zona, enfocado a turistas, de mucho ruido y pocas nueces, en este caso mucho plato y poco de lo demás, donde la comida y el servicio dejan mucho que desear, y al final sales con la sensación de que te han clavado.

No es el caso de este Bodegón. Por lo menos, no es tan ostensible, aunque algún detallito tiene. Si es verdad que, pese a haber bastante personal, se les veía un poco apresurados. Parecía que había urgencia por sacar los platos, quizá para que quedaran libres las mesas lo antes posible. En nuestro caso, en un pis pas teníamos en la mesa todo lo que habíamos pedido. Aquello era un lío de platos al que no sabías como meterle mano. Un poco mas de pausa hubiera estado bien. Para compensar, tengo que decir que todo lo que comimos estaba muy bueno. Desde las Garbanzas, muy sabrosas, a los crujientes Calamares a la Romana, pasando por un rico plato de Carne con papas, muy tierna la carne y muy buena la salsa. También nos gustaron mucho las Potas en salsa, aunque tengo que resaltar otro detallito que no me gustó: Es la primera vez que veo que se acompañe de papas fritas un plato de potas en salsa. Para mi chirría un poco, en la tierra de las papas arrugadas. Y el cambio de fritas a arrugadas, supone un incremento de 3,50€, con lo que se va el plato a 9,50€. De postre pedimos un tiramisú y un riquísimo postre de Papaya con mousse de gofio y espuma de plátano. Estupendo postre, aunque no lo pareciese, por la pinta de Blandy Blub que tenía en la copa (si, yo también fuí a la EGB). De beber, probamos un vino blanco afrutado de la zona. Muy bueno, cayó medio litrito, además de 3 refrescos y agua. La cuenta fué de casi 49 euros. No es una clavada, aunque los pequeños detalles de las papas arrugadas y los 2 euros por la botella de agua si me lo parecieran. Pese a todo, un buen sitio.


Dirección: Avenida de Venezuela, 13. GARACHICO.
Teléfono: 922-830 883