¡A quien se le ocurre ir el Día de la Madre a comer a un restaurante, sin reservar antes!. No se podrán quejar los restaurantes (por lo menos por los que pasamos nosotros, y fueron unos cuantos), de la afluencia de clientes durante el primer Domingo de Mayo. Nosotros fuimos a un sitio en la zona del Bollullo, en La Orotava, no a celebrar el Día de la Madre, sino, como otras veces, a ver que tal estaba, y no caí en la cuenta de que podía pasar lo que nos pasó. Todo lleno hasta las 3 de la tarde (era la una).
Empezamos entonces una ruta que pasó por La Orotava, Los Realejos, Icod el Alto y La Guancha, en la que alternamos sitios completamente llenos, con algunos que decepcionaban un poco al entrar. Seguimos hasta llegar a Garachico. Paramos por allí, (con un calor que ya empezaba a ser agobiante), y recorrimos andando varios sitios. Todos hasta la bandera, y en alguno nos recibían casi con cajas destempladas. No entiendo que alguien se enfade, con la que tenemos encima, por tener el comedor lleno. Sobre todo que se enfaden con el cliente que entra a comer, en horario de comedor. Con decir (como hicieron la mayoría de los sitios) que está ocupado, y que hay que esperar por mesa, entendido. Uno decidirá si espera o no, y santas pascuas. Pero tratando así a la gente, además de no esperar, lo que se garantizan es que la gente no vuelva. Afortunadamente fueron minoría, y además nos permitió conocer el sitio que les comento hoy, que no había visto antes.
De vuelta hacia el coche, para dejar la zona, vimos esta casita antigua, con varios carteles en la fachada mostrando lo que ofrecían, y entramos a mirar. También estaba lleno, pero, aquí si, el señor, muy amable, nos ofreció dos opciones: montarnos una mesa pequeña en el patio interior, donde ya había unas cuantas mesas ocupadas, o esperar de diez a quince minutos a que terminara una mesa. Como íbamos a estar muy apretados, optamos por esperar. Y fueron realmente unos quince minutos. Además, terminó también un grupo bastante numeroso de turistas, con lo cual nos quedamos casi solos en ese comedor. La casa tiene varias estancias convertidas en comedores, creo que tres habitaciones, además de la zona de patio, donde también hay mesas. Una casa antigua, la típica casa de comidas, acogedora, donde se estaba fresquito, y que no parece (aunque lo esté) mas orientada al turismo extranjero que busca la "typical canarian food", que al residente. Tampoco en los precios, como comprobé después. Y aquí (no como en otros sitios de la zona que se anuncian) si tienen "typical canarian food", como pueden ver pulsando este enlace. No tenían todo lo que aquí anuncian, pero si había bastante variedad. Fuera de carta tenían Rancho canario, Potaje de berros y carne de cabra.
No sé si es costumbre, o fué por habernos hecho esperar, pero nos pusieron un platito de salpicón de palitos de cangrejo para picar, mientras decidíamos que pedir. La verdad es que el servicio fué muy bueno en todo momento. Pedimos unas buenas Garbanzas, y también un jugoso plato de Carne con papas. El Conejo en salmorejo estaba muy rico, y con las papas arrugadas venían unos trozos de pella de gofio, muy dulces y sabrosos. Nos encantaron y pedimos un poco más. Y el plato que más nos gustó: Las costillas en adobo. Realmente exquisitas. Las costillas, tiernas y carnosas, y el adobo sabroso. De postre pedimos flan de vainilla, y flan de chocolate. Lo único flojo de la tarde. El sabor y la textura eran mejorables. Dicen que son caseros, pero no me lo parecieron. O parecían hechos en casa, pero preparado de sobre (no tengo nada en contra, si el resultado final es bueno, pero no fué el caso). De beber, una cuarta de vino, cuatro refrescos y agua. Comimos muy bien, con la salvedad de los postres, y creo que salir lleno y satisfecho, en Garachico, por poco mas de 37 euros, está pero que muy bien. Una razón más para acercarse a este bello rincón, además de contemplar su flamante puerto deportivo y pesquero, o de recorrer la Ruta del concurso "De tapas por Garachico", hasta el 3 de Junio. Aquí tienen la relación de participantes. Que aproveche.
No sé si es costumbre, o fué por habernos hecho esperar, pero nos pusieron un platito de salpicón de palitos de cangrejo para picar, mientras decidíamos que pedir. La verdad es que el servicio fué muy bueno en todo momento. Pedimos unas buenas Garbanzas, y también un jugoso plato de Carne con papas. El Conejo en salmorejo estaba muy rico, y con las papas arrugadas venían unos trozos de pella de gofio, muy dulces y sabrosos. Nos encantaron y pedimos un poco más. Y el plato que más nos gustó: Las costillas en adobo. Realmente exquisitas. Las costillas, tiernas y carnosas, y el adobo sabroso. De postre pedimos flan de vainilla, y flan de chocolate. Lo único flojo de la tarde. El sabor y la textura eran mejorables. Dicen que son caseros, pero no me lo parecieron. O parecían hechos en casa, pero preparado de sobre (no tengo nada en contra, si el resultado final es bueno, pero no fué el caso). De beber, una cuarta de vino, cuatro refrescos y agua. Comimos muy bien, con la salvedad de los postres, y creo que salir lleno y satisfecho, en Garachico, por poco mas de 37 euros, está pero que muy bien. Una razón más para acercarse a este bello rincón, además de contemplar su flamante puerto deportivo y pesquero, o de recorrer la Ruta del concurso "De tapas por Garachico", hasta el 3 de Junio. Aquí tienen la relación de participantes. Que aproveche.
Teléfonos: 922-133 488 / 922-133 403
Muchas gracias por el aporte. Lo tendremos en cuenta cuando vayamos por Garachico.
ResponderEliminarAmigo Quico, plenamente de acuerdo contigo en esos lugares donde entras y casi tienes que pedir perdón por ir a comer, te contestan de mala manera y muchas veces te echan con cajas destempladas, mi carácter y los años me hacen tenerlo claro mas cada día, y como hacíamos de niños con ponerles un cruz y raya y se acabo, no volveré nunca más y a mi entorno informo de las actitudes, cualidades y falta de profesionalidad de esos sitios. Uno no vive para comer, pero si come para vivir, y cuando lo realiza en estos bodegones, guachinches y restaurantes de copete o no, lo que le gusta es tener un ambiente agradable para poder disfrutar lo que nos ofertan y eso se hace con la mano de la cocina y el buen hacer del servicio, por eso no entiendo a la gente que no quiere ganar dinero trabajando y se cargan negocios que podrían ser muy rentables.
ResponderEliminarHablando de este Bodegón Casa Juan de Garachico, mira que he pasado veces por delante y no he entrado creyendo eso que era un garito para güirís con el spanhis food, por lo que veo no es así, en la próxima visita que hagamos por la tierra de la parienta es muy probable que pasemos por ahí a tener una buena experiencia culinaria.
Saludos y gracias por la labor informativa
Hola Luis. Yo ya le puse la cruz a un par de ellos, y la verdad es que alguno me decepcionó especialmente, ya que era un sitio con muy buena pinta. Que se le va a hacer. Referente a este Bodegón, mi primera impresión fué la misma, de hecho el 85% de los clientes eran güiris,pero no, nada que ver con otros que hay por las cercanías. Hay que probarlo. Un saludo
EliminarEn mi opinión, que estuve allí hace una semana, es un sitio totalmente para guiris. Nos sirvieron con mucha frialdad y nos trataron como verdaderos "turistas", o sea, muy mal. platos con pequeñas raciones, todo sabía igual, tanto el atún como el conejo. Por el pan (que no pedimos) nos clavaron 3 euros, y por 9 mejillones (que los conté) nos cobraron 5 euros. Fatal no recomendable y lo siento, porque me dejé guiar por este blog para ir a comer por Tenerife. Una pena!
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